Esta alianza pretende reafirmar la fortaleza tecnológica de Sharp como suministrador de pantallas de LCD y la competitividad de Sony en el mercado de las televisiones, según representantes de ambas compañías. Con esta inversión millonaria, Sony aportará un tercio del coste estimado, unos 380.000 millones de yenes (3.500 millones de dólares), para la construcción de una nueva fábrica en la planta de Sharp en Sakai, en la provincia de Osaka, en 2009.
Tras esta fusión, Sharp poseerá el 66 por ciento de la futuracompañía y Sony el resto. La compañía de electrónica Sony optó por unirse a Sharp para asegurarse un suministro estable de LCD a largo plazo, ante la creciente demanda de televisores planos en el mercado global. Sony desea expandir su cotización en el mercado global de pantallas planas de televisión tras las sólidas ventas de su modelo de LCD Bravia en Norteamérica y en otras zonas. En Japón, Sharp, con sus Aquos, es líder de ventas con el 40 porciento del mercado de LCD frente a Sony, que se sitúa en un 20 porciento, y Panasonic, con un porcentaje similar, según la consultora japonesa BCN de nuevas tecnologías.
Sony provee pantallas grandes de LCD desde que se unió con la surcoreana Samsung. Esta unión con Sony beneficiará también a Sharp, ya que podráreducir su presupuesto financiero en la construcción de su planta enSakai. Ambas empresas esperan que la nueva fábrica comience suproducción en el año fiscal 2009, que finalizará en marzo de 2010. Sharp pretende impulsar su presencia como líder en suministro depantallas LCD mediante más alianzas con otras compañías comoToshiba. Según algunos analistas, la industria electrónica de Japón estáatenta a los reajustes en el negocio de LCD y fijan a las niponasSharp y Matsushita Electric como las empresas emergentes en elsuministro de estas pantallas. En diciembre, Canon, Hitachi y Matsushita anunciaron un acuerdo para desarrollar y fabricar conjuntamente paneles de LCD. En todo el mundo los suministros de pantallas LCD, tanto de televisor como de ordenador, supusieron 371 millones de unidades el año pasado, el 37 por ciento más que en 2006.
