La venta de música en España sube por tercer año consecutivo

Hemos gastado, durante 2016, 163,7 millones de euros en música grabada, una cantidad que supera tímidamente los 161,1 millones registrados en la temporada anterior.

La suma de este nuevo incremento del 1,67% en el último ejercicio, después de dos años de clara recuperación, confirma la tendencia de mejora en un sector que, golpeado duramente por la piratería y las descargas ilegales, había sufrido una importante caída de su volumen de negocio años atrás.

El mercado digital se fortalece y alumbra un futuro optimista. El pop en español sigue siendo el género musical que mayor interés despierta entre los consumidores. 2016 se cierra con Manuel Carrasco liderando por primera vez la clasificación de los álbumes con mayor venta en España.

El A lo largo de 2016 se superó el millón de suscriptores de pago a los servicios de música que ofrecen streaming en España (Spotify, Apple Music, Google Play, Deezer, entre otros). Los ingresos por suscripción aumentaron en un 37,4%, hasta los 62,2 millones de euros, mientras que el streaming gratuito y financiado por publicidad sube un 24,7% hasta los 25,3 millones. En concreto, el sector digital pasó de generar unos ingresos de 79,6 millones a 100,2 millones de euros, un estirón espectacular de casi un 26 por ciento. 


VENTAS POR CANTANTES

Manuel Carrasco se apunta un importante triunfo a nivel particular al terminar 2016 como el artista  más vendedor de España gracias a su octavo álbum, Bailar el viento. Es la primera vez que Carrasco,  con una dilatada carrera ya desde su debut en 2002, se coloca en lo más alto de la clasificación anual,  que en lo que llevamos de década  se  había visto liderada por Sergio Dalma  (2009 y  2010), Pablo  Alborán (del 2011 al 2014) y Alejandro Sanz (2015). “Bailar el viento” se coloca en esa posición de  privilegio  con  89.500  unidades,  mientras  que  su  más  inmediato  perseguidor,  “Quítate  las  gafas”  (Melendi), se queda en 53.500. Con el gran mérito, eso sí, de que se trata de un álbum que vio la luz  en el mes de noviembre.

Las  cifras  de  ventas  de  álbumes  mantienen  el  predominio  arrollador  por  parte  de  los  artistas  españoles con algunas excepciones. La británica Adele, que con su “25” ya había alcanzado la cuarta  plaza en 2015, se coloca tercera al sumar otros 45.600 unidades vendidas el pasado año. La banda  Coldplay  también  prolonga  la  vigencia  de  “A  head  full  of  dreams”, en el  noveno  puesto  con  casi  29.000 copias. La banda sonora de “Soy luna” se sitúa en la posición 16 con 23.400 copias.  Metallica,  con el reciente “Hardwire to self destruct”, rozan los 20.000 discos y ocupan el número 19. Son los  únicos  nombres  foráneos en el  Top  20, en el  que  constan,  por  este  orden,  Dani Martín  y  su  “La  montaña rusa”, David Bisbal (“Hijos del mar”), Malú (“Caos”), Vanesa Martín (“Munay”) o la banda  de  chicas  Sweet  California,  quizá  la  gran  sorpresa  del  año:  octavas  con  “Head  for  the  stars”  y  duodécimas gracias al recién publicado “3”.

Pablo  López,  Mónica  Naranjo,  Antonio  José,  Gemeliers,  Alejandro  Sanz,  Antonio  Orozco,  Leiva  y  Bustamante son, siempre por orden, los demás nombres que figuran en las 20 primeras líneas de la  lista. Como curiosidades, Love of Lesbian, la banda española más popular en los festivales, se aúpa  hasta el 22 con “El poeta Halley”. El disco de despedida de David Bowie, “Blackstar”, mejor álbum de  2016 para la práctica  totalidad de la crítica internacional y española,  fue el número 23 en ventas  (18.500 discos), mientras que otro mito también muy llorado, Leonard Cohen, se coloca en el 29 con  su canto del cisne, “You want it darker”. Entre ellos, Adrián se coloca en el puesto 25 con su álbum  debut, “Lleno de Vida” y el regreso de Isabel Pantoja, “Hasta que se apague el sol”, publicado en  noviembre, se conforma con el puesto 31. Más modesto es el número 40 que obtienen The Rolling  Stones con su primer elepé de nuevas grabaciones en 12 años, “Blue & lonesome”, si bien es cierto  que los 12.000 ejemplares despachados lo fueron en las cuatro semanas de diciembre. Los artistas  de gran recorrido y predicamento entre la crítica han de conformarse con posiciones en la parte baja  del Top 100. Así, “Keep me singing”, el rutilante regreso del norirlandés Van Morrison, no pasa del  número  84.  Y  hay  que  bajar  5  puestos  más,  hasta  el  89,  para  encontrarnos  con  los  británicos  Radiohead y su “A moon shaped pool”.

LAS CANCIONES


En  lo  referente  al  Top  100  de  canciones,  que  se  elabora  combinando  los  datos  de  escuchas  por  streaming y  descargas  digitales, la música más  rítmica y  bailable  vuelve a  conseguir  una mayoría  arrolladora. Y Enrique Iglesias, ya todo un clásico en este listado, ocupa nuevamente lo más alto de  la  tabla, esta  vez en  compañía  de Wisin  y  su  popularísimo  “Duele el  corazón”.  La australiana  Sia  consigue un extraordinario éxito con “Cheap thrills”, que llega al número 2 anual, mientras que la  medalla de bronce es para otro tema enormemente tarareado, “La bicicleta”, que suma los talentos  de Carlos Vives y Shakira.

Las  demás  posiciones  de  privilegio  también  corresponden  a  artistas  de  gran  tirón.  Llama  especialmente la atención el logro alcanzado por la banda colombiana Morat y su contagioso “Cómo  te atreves” obtienen un cuarto puesto enormemente meritorio, que les alza como la gran revelación  musical  en  el  apartado  de  canciones.  Mientras,  el  canadiense  Justin  Bieber  protagonista  de  multitudinarios conciertos en Barcelona y Madrid en noviembre, es quinto con “Sorry” y duodécimo  con “Love yourself”. Nicky  Jam y Drake/Wizkid/Kyla, en los puestos números 5 y 6, corroboran el  auge de los ritmos urbanos con “Hasta el amanecer” y “One dance”, respectivamente, mientras que  Alan  Walker  (Faded),  Joey  Montana  (Picky)  y  Mike  Posner  y  su  frenético  “I  took  a  pill  in  Ibiza”  completan el Top 10 y se adelantan a Coldplay, undécimos con otro  tema  también muy eufórico,  “Hymn for the weekend”.