En muchas ocasiones los usuarios denuncian páginas webs donde se vierten contenidos injuriosos, datos personales o imágenes privadas que atentan contra su honor, su intimidad y su propia imagen. La sola notificación de la demanda provoca la retirada de los contenidos, a pesar de que el daño ya está hecho.“Es muy complicado que la demanda prospere por la dificultad de probar que los contenidos estaban publicados, dejando indefenso al usuario”, asegura Miguel Pérez Subías, presidente de la Asociación de Usuarios de Internet (AUI).
La Asociación ha puesto en marcha un servicio que permite al usuario obtener un acta testimonial del contenido de una página web que constata lo publicado en la dirección de Internet en el momento en el que se realiza la solicitud. “Es una vía más fácil, rápida, económica y con garantías ya que los usuarios pueden solicitarla desde casa y se realizan copias en papel y en formato electrónico”, explica Pérez Subías.
Una vez que la AUI recibe una petición, el responsable del servicio realizará el acta testimonial con una copia de los contenidos que se viertan en la página solicitada en ese momento. Se realizarán dos copias en papel, selladas y firmadas por el responsable del servicio, y dos en CD-ROM. Una de las copias se remite, por correo postal y electrónico, al usuario que realiza la petición. La otra copia queda archivada en la Asociación durante un periodo de un año.
El acta testimonial recogerá los datos de la persona de la Asociación que da testimonio, la fecha y hora en la que se hace la consulta, el contenido de la página de Internet y un anexo con los datos que figuran en el registro WHOIS del dominio en el que está alojado este contenido.
