Muchos JUEGOS en la CAMPUS PARTY

Y LA NOVEDAD estuvo en la la presentación de Mindball, un videojuego que poco tiene que ver con lo visto hasta ahora, y eso que se ha visto casi de todo. Su creador, Magnus Jonsson, explicó al público asistente qué es lo que se necesita para vencer: no vale pensar en ganar, ni concentrarse en el juego, ni intentar llevarse la victoria. Todo lo contrario. El secreto consiste en dejar la mente en blanco para que la banda que nos colocamos en la frente registre las menores ondas posibles de nuestro cerebro. De esta manera, se consigue que la pelota que reproduce nuestros impulsos llegue a la portería del adversario. Por cierto, en la FOTO, JAVIER RENOVELL de PC ACTUAL ganó la partida. Estuvo MUY RELAJADO.
Más espectacular fue la puesta de largo de Virtusphere, el último aparato en simulación. Ya no se trata de una pistola o un volante que registra nuestros movimientos. Este ingenio creado por Ray Latipov es una esfera de más de tres metros de diámetro en la que el jugador se introduce para jugar en 360 grados, en todas direcciones para disfrutar de un shooter en primera persona que promete romper las barreras del espacio.
Pero también se pudieron ver otros tipos de simulación, como las de vuelo, sin duda las que están causando más atracción a los campuseros. Varios pilotos de Eurofighter retaron a sus homónimos virtuales a competir a los mandos de un caza, mientras otros expertos en simuladores revivieron algunos de los combates aéreos más cruentos de la Segunda Guerra Mundial con IL2 Sturmovick: 1946. Competiciones de todo tipo de juegos como Need For Speed Carbono, Comand&Conquer o Counter Strike animaron la jornada levantando piques entre los campuseros, en un día en el que la estrategia también tuvo protagonismo: se presentó en Campus Party el videojuego World in conflict, estrategia en tiempo real sobre la invasión de la URSS a Estados Unidos en la década de los ochenta, y hubo también competiciones de World of Warcraft en el pabellón de Ocio.