El parque eólico marino Wikinger de Iberdrola

El parque eólico marino de Wikinger ha sido inaugurado en octubre de 2018 y ha supuesto una inversión de 1.400 millones de euros.

Ya suministra 350 megavatios (MW) de capacidad a la red eléctrica alemana y aporta energía renovable y de alta eficiencia a 350.000 hogares —lo que equivale al 20% de la demanda de energía del estado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, en el que se ubica—. Este flujo de energía renovable tendrá un destacado impacto positivo sobre el medio ambiente, al evitar la emisión a la atmósfera de casi 600.000 toneladas de CO2 al año.

Iberdrola dice que Wikinger marca la entrada de Iberdrola en el mercado eléctrico alemán, país en el que se acaba de adjudicar la construcción de otros dos parques eólicos marinos: Baltic Eagle (476 MW) y Wikinger Süd (10 MW). La suma de estos tres proyectos, todos ellos situados junto a la isla de Rügen, dará lugar al mayor complejo marino del mar Báltico,con una capacidad total instalada de 836 MW y una inversión conjunta de 2.500 millones de euros.

Se trata de la primera instalación eólica marina diseñada y operada al cien por cien por una empresa española. 

FASES DE LA CONSTRUCCIÓN

La construcción del parque eólico marino de Wikinger, que ha sido especialmente compleja, se ha desarrollado en distintas fases:

  • Hincado en el fondo marino de 280 pilotes que sujetan las cimentaciones. Estas estructuras, construidas por la empresa española Windar (Asturias), tienen 40 metros de longitud, 2,5 metros de diámetro y un peso unitario de 150 toneladas.
  • Instalación de los jackets o base de la subestación marina.
  • Instalación y puesta en marcha de la subestación marina Andalucía, de 8.500 toneladas de peso y construida por la empresa española Navantia en su sede en Puerto Real (Andalucía). Será utilizada conjuntamente por Iberdrola y 50Hertz, operador del sistema eléctrico alemán.
  • Instalación y puesta en marcha, en coordinación con 50Hertz, de los dos cablessubmarinos que conectan la energía del parque con la subestación terrestre de Lubmin.
  • Instalación y puesta en marcha de más de 80 kilómetros de cables submarinos entre los aerogeneradores del parque eólico.
  • Instalación de las 70 jackets o cimentaciones de las turbinas, de 620 toneladas de peso cada una, fabricadas por la empresa danesa Bladt y por Navantia en su astillero de Fene (Galicia).
  • Instalación y puesta en marcha de los 70 aerogeneradores. Las turbinas, fabricadas por Siemens Gamesa en sus plantas de Bremerhaven y Stade (Alemania), tienen 5 MW de potencia unitaria y son del modelo AD 5-135. Se trata de los aerogeneradores de mayor potencia y dimensiones que Iberdrola ha instalado en su historia. Con una altura total de 165 metros, están formados por una nacelle de 222 toneladas de peso, un rotor de 135 metros de diámetro, cuyas palas tienen 67 metros de longitud cada una, y una torre de 75 metros de altura.